Microsoft construye en Wisconsin el campus más grande para IA, listo en 2026


Microsoft está dando un paso monumental hacia el futuro de la inteligencia artificial con la construcción de un vasto campus en Wisconsin, el cual se espera esté operativo en 2026. Este desarrollo se enmarca dentro de la estrategia de la compañía para liderar el sector de la IA, incorporando tecnología avanzada y un diseño pensado para la eficiencia y el rendimiento.
Un campus de gran envergadura
Este nuevo campus, que ocupará más de 100 hectáreas, contará con una superficie construida de aproximadamente 110.000 metros cuadrados. La gran escala de este proyecto está diseñada específicamente para soportar operaciones de inteligencia artificial a gran escala, diferenciándose así de los centros de datos tradicionales. No es un lugar para alojar correos electrónicos o sitios web, sino un centro enfocado en entrenar y ejecutar modelos de IA complejos que alimentan aplicaciones como ChatGPT o Copilot.
Para llevar a cabo esta ambiciosa empresa, Microsoft ha comprometido una inversión inicial de 3.300 millones de dólares. Según la compañía, su objetivo es que el campus alcance un rendimiento diez veces mayor que el del superordenador más rápido del mundo en la actualidad, enfatizando que la competencia en el campo de la IA se está centrando en el aumento del poder computacional.
La materialización de la nube
El campus de Fairwater, como se le denomina, no solo representa un avance tecnológico; su construcción física es un verdadero hito en la edificación de centros de datos. Este proyecto se asienta sobre cimientos robustos, que incluyen 75 kilómetros de pilotes de cimentación, 12.000 toneladas de estructura de acero, 193 kilómetros de cableado eléctrico de media tensión y 117 kilómetros de tuberías mecánicas.
Satya Nadella, CEO de Microsoft, ha declarado que Fairwater será un punto estratégico clave para manejar las crecientes demandas de energía y capacidad de cómputo requeridas por las aplicaciones de IA. La infraestructura física consiste en cemento, acero, tuberías y cables que se extienden profundamente bajo tierra, con el fin de asegurar que la inteligencia artificial funcione de manera continua y eficiente.
Un sofisticado sistema de refrigeración
La refrigeración es uno de los mayores retos en la gestión de centros de datos, y en el caso de Fairwater, se vuelve aún más importante debido a la alta densidad de chips que albergará. Wisconsin presenta un clima extremo, donde las temperaturas pueden descender por debajo de los 0 °C en invierno y superar los 25 °C en verano, lo que requiere de un sistema que funcione de manera eficiente en una amplia variedad de condiciones climáticas.
Microsoft ha decidido implementar un sistema de refrigeración líquida en circuito cerrado, que permite reutilizar el agua sin desperdicios y que se ha diseñado para asegurar que más del 90% de la capacidad del campus funcione con este método. La instalación contará además con la segunda mayor planta de enfriadoras de agua del mundo y 172 ventiladores de seis metros de altura, los cuales complementan el sistema de refrigeración al disipar el calor acumulado en el centro de datos.
Capacidad y rendimiento sobresalientes
El campus de Fairwater no solo se ha diseñado para la construcción, sino que también incorporará un conjunto impresionante de capacidades técnicas. Cada rack en el sistema integra 72 GPU NVIDIA Blackwell, que se conectan mediante NVLink y NVSwitch para compartir hasta 1,8 terabytes por segundo de información, accediendo a 14 terabytes de memoria agrupada. Aunque la empresa no ha especificado la cantidad exacta de racks que albergará, se menciona que en total estará compuesta por "cientos de miles de aceleradores".
Estos sistemas trabajarán en conjunto para operar como un superordenador capaz de procesar 865.000 tokens por segundo, lo que ejemplifica la magnitud del proyecto. Además, Fairwater formará parte de una red global de centros de datos de IA interconectados a través de la Wide Area Network de Azure.
Desafíos y promesas del proyecto
A pesar de las vastas promesas de rendimiento, el proyecto de Fairwater sigue siendo una obra en desarrollo y muchos de sus objetivos deben ser medidos en el futuro al momento de empezar a operar. La compañía ha indicado que se espera que el campus, al comenzar sus operaciones en 2026, pueda ofrecer un rendimiento que supere hasta diez veces el de los superordenadores más potentes actuales. Sin embargo, aún no se ha especificado a qué superordenador se refiere esta comparación.
Los componentes técnicos del campus están diseñados para garantizar un apoyo constante a grandes volúmenes de datos, eliminando cuellos de botella en el procesamiento. Con una capacidad total en exabytes, y sistemas de almacenamiento que se asemejan en tamaño a "cinco campos de fútbol," este centro de datos promete manejar más de dos millones de operaciones de lectura y escritura por segundo. Además, se ha desarrollado un sistema propio que optimiza el acceso a los datos, asegurando que las GPU estén siempre operativas y listas para el procesamiento intensivo.
En resumen, Fairwater se presenta como una ambiciosa manifestación de cómo la infraestructura física puede apoyar una era dominada por la inteligencia artificial. Sus dimensiones y capacidades técnicas son un indicativo claro de la transformación que Microsoft busca promover en la industria tecnológica.
El futuro de la IA avanza rápidamente, y el campus de Fairwater es un reflejo de lo que está por venir. Para mantenerse al tanto de más noticias y desarrollos sobre tecnología y su impacto, se invita a los lectores a seguir explorando en mi blog.